Brie, un queso tradicional francés
El queso brie es un queso originario de la región de Brie, en Francia, elaborado con leche cruda de vaca. Se caracteriza por su corteza enmohecida, su textura cremosa y un sabor con aromas leves de amoniaco.
Lo puedes disfrutar de muchas maneras. Se puede comer solo, horneado, en sándwiches o ensaladas, con vino tinto o blanco, ligero y afrutado, miel, mermelada, frutos secos o pan baguette.
No cortes el queso brie hasta que esté listo para comer, ya que la exposición al aire puede acelerar el proceso de moho.
Se dice que Carlomagno, cuando probó el brie quedó encantado.
El queso brie es un queso originario de la región de Brie, en Francia, elaborado con leche cruda de vaca. Se caracteriza por su corteza enmohecida, su textura cremosa y un sabor con aromas leves de amoniaco.
Lo puedes disfrutar de muchas maneras. Se puede comer solo, horneado, en sándwiches o ensaladas, con vino tinto o blanco, ligero y afrutado, miel, mermelada, frutos secos o pan baguette.
No cortes el queso brie hasta que esté listo para comer, ya que la exposición al aire puede acelerar el proceso de moho.
Se dice que Carlomagno, cuando probó el brie quedó encantado.
El queso brie es un queso originario de la región de Brie, en Francia, elaborado con leche cruda de vaca. Se caracteriza por su corteza enmohecida, su textura cremosa y un sabor con aromas leves de amoniaco.
Lo puedes disfrutar de muchas maneras. Se puede comer solo, horneado, en sándwiches o ensaladas, con vino tinto o blanco, ligero y afrutado, miel, mermelada, frutos secos o pan baguette.
No cortes el queso brie hasta que esté listo para comer, ya que la exposición al aire puede acelerar el proceso de moho.
Se dice que Carlomagno, cuando probó el brie quedó encantado.